Aunque intentes evitar el sufrimiento, él te encontrará.

Porque es parte de la vida y, aunque sea incómodo, puede ser un gran maestro, si te abres a sus enseñanzas.

Aprender a sufrir es posible, aunque suene raro. No se trata de ir en búsqueda del sufrimiento, ya que como dice Viktor Frankl: “Sufrir de manera innecesaria es masoquista más que heroico”.

La propuesta es aprender a tolerar la incomodidad, la incertidumbre, la frustración, cuando aparecen.

Este aprendizaje es quizás el más valioso para nuestra salud emocional. El secreto no se encuentra en el exterior, sino en cómo estamos interpretando y experimentando ese exterior.

El sufrimiento es una experiencia interna, por ello, según Frankl, “si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento”.

Bibliografía:

• Frankl, V. (2015). El hombre en busca de sentido (3° ed.). Herder Editorial.